CUANDO MENOS TE LO ESPERAS

Todos hemos pescado y visto pescar muchas lubinas, más grandes o más pequeñas, con más lucha o menos... Pero siempre hay alguna que recordamos por la emoción o dificultad de su captura o por alguna otra circunstancia. Estoy seguro que para David (spinningdesdeelpedrero.blogspot.com) éste será un robalo que recordará mucho tiempo seguro, por lo inesperado del encuentro.

Fue hace unas semanas en un día en el que todo estaba saliendo mal. Ya habíamos maldecido los palangres que cubrían toda la linea de costa, y cuando digo toda es toda, debido a que el mar estaba como un plato habían largado una linea detrás de otra hasta cubrir muchas millas, con lo que era casi imposible ni siquiera intentar pescar en ningún sitio. Habíamos perdido muchos señuelos y las capturas a primera hora, que era cuando se podían esperar en un día tan tranquilo, habían sido muy escasas. Probamos a jigging y tan solo un san martiño se dejó ver junto a alguna jurela y sarreta.

Decidimos meternos en ría por lo menos a pasarlo bien con los paseantes y pequeños vinilos, pero las condiciones eran malas con la marea casi baja y en mareas pequeñas, y tan solo pude engañar a una kilera en unos bajos con un microvinilo. La sorpresa llegó en uno de los últimos lances muy cerca ya de puerto y sobre las 12 de la mañana, David clava lo que parece un buen pez en un canal perfectamente visible con el clareo que teníamos.

 El señuuelo artífice fue un pequeño vinilo
  Mako Soft de 9cm de Catch it, con la cabeza
 de goma cortada para acoplarle la cabeza plomada.












No fue la lubina más grande, ni la que más guerra ha dado, pero es de las que te acuerdas cuando las cosas van mal y te hacen mantener la esperanza hasta el final. Estoy seguro que saldrá en más de alguna conversación otro día de pesca.


Os dejo el vídeo de la captura sin cortes.